Jugar o cambiar la actividad dentro de tu salon, llevando a tus estudiantes a recapacitar, en el suelo sin puputres, son la voz estridente del docente, o sin los regaños clasicos del dáa, es que observen, sientan, sin que el docente pida el silencio habitual, es allí cuando el estudiante siente, por sus información algo pasa de nuevo.
Pues bien, cada cual escucha un sonido muy tenue, que aumenta, unas frases que ni se entienden, pero son susurros, ellos los niños o niñas toman esto cada vez mas en serio, el olor a incienso, la lucha por entender lo que sucede en una clase que no es clase.
al subir un trecio mas el volumen la atención se hace mas elevada, entre ellos se hace una busqueda del caso, siempre pensando en hacer ejercicios de algebra o de geometria, pero nunca lo discontinuo de lo que ocurre.
Lo anterior es un hecho, un motivo por el cual cada ser en ese recito se pregunta que es de bueno no tener clase habitual, dentro de todo se perdera el tiempo, son los susurros de quienes son incredulos al momento, sus oidos se desplazan, su manos sudan de su impotencia, la busqueda de respuestas se agota, como la musica de marimbas, así de voces muy sencillas con cantos muy claros, pero sus interrogacion esta mas clara que nunca.
Despues de todo lo alterior el estudiente se relaja, toma mas en serio su respuesta de ser cadavez mejor, eso si el alaraco de tener otra clase como la que han vivido no se puede repetirya que las directivas se quejan de muchas acciones no academicas, por las cuales lo que se pretende es hacer un alto en las actividades, llenar un poco el amor propio, bueno todo lo anterior es muy motivador
