La oratoria y comunicación son herramientas claves en el mundo de hoy, y mi estrategia para lograr obtener dichas herramientas es ser práctica ante cualquier concepto que se vaya desarrollando en las clases. Desde mi paso en la universidad descubrí lo importante de ir practicando todo lo que se va adquiriendo, así alcanzamos un aprendizaje más rápido; y considero que he tenido un don de compartir mis conocimientos.
Tuve la oportunidad de vivir fuera de Colombia y mi soltura me llevó a ser coordinadora de un instituto que ofrecía cursos, allí pude impartir algunos conocimientos, allí pude capacitar al personal para que ofrecieran una clases con más soltura y era la cara visible de dicha institución, compartía con los alumnos y siempre consideraba los tiempos para la retroalimentación que es clave para continuar de forma positiva en los procesos de formación. Lo más importante en esto fue encajar en una cultura completamente distinta a la mía, lo que me hizo ver que impartir mis conocimientos es más que una simple tarea o que un simple trabajo.
Hay un dicho que dice: quien hace lo que ama jamás trabajará, pues así es mi sentir, no trabajo, hago lo que amo y eso es un plus.
Algo muy importante en todo esto es captar la necesidad primaria de quien le haya contactado, de ese modo la clase o la guía que podemos brindar será efectiva, y creo tener la empatía y la perspicacia necesaria para ello. No es hablar por hablar, es pasar un conocimiento.