Animo a mis estudiantes a hacer preguntas sin temor, sin importar cuan simples o repetitivas puedan parecer. Entiendo que todos tenemos ritmos de aprendizaje únicos y entonces podemos evidenciar que las matemáticas son más accesibles de lo que comúnmente se piensa. En un ambiente de aprendizaje tranquilo, la curiosidad es bienvenida en todo momento.
Animo a mis estudiantes a hacer preguntas sin temor, sin importar cuan simples o repetitivas puedan parecer. Entiendo que todos tenemos ritmos de aprendizaje únicos y entonces podemos evidenciar que las matemáticas son más accesibles de lo que comúnmente se piensa. En un ambiente de aprendizaje tranquilo, la curiosidad es bienvenida en todo momento.