El conocimiento se desarrolla en dos sentidos, dialéctico e investigativo con el fin de vincular la academia con las vivencia diaria y así encontrar una adecuada comprensión de las escrituras y los diversos lineamientos de la teología aplicados a la actualidad.
El conocimiento se desarrolla en dos sentidos, dialéctico e investigativo con el fin de vincular la academia con las vivencia diaria y así encontrar una adecuada comprensión de las escrituras y los diversos lineamientos de la teología aplicados a la actualidad.