La filosofía y la literatura son dos disciplinas pasionales, es decir que son artificios pulsionales en el espíritu humano. Por ende me considero un apasionado de la filosofía y la literatura, mi relación con la filosofía y la literatura parte desde los sentimientos, los afectos y el amor. Mi metodología se centra en aprovechar al máximo las lecturas de literatura y filosofía para poder conversar...
La filosofía y la literatura son dos disciplinas pasionales, es decir que son artificios pulsionales en el espíritu humano. Por ende me considero un apasionado de la filosofía y la literatura, mi relación con la filosofía y la literatura parte desde los sentimientos, los afectos y el amor. Mi metodología se centra en aprovechar al máximo las lecturas de literatura y filosofía para poder conversar y discutir sobre los conceptos, temas, asuntos, tópicos que se necesiten abordar. El diálogo en la filosofía y la literatura es imprescindible, la lectura debe compartirse y participar del encuentro con los textos; desde Platón y sus diálogos presentan dicha importancia.
Me gusta trabajar con películas o series para poder explicar conceptos de manera más didáctica. O trabajar con la música o las artes en general, para crear constelaciones conceptuales como lo sugiere Walter Benjamin para que el sentido y la significación se disemine orgánicamente en la vida de quién esté interesado o estudiando filosofía. Las condiciones intertextuales de cada uno de los libros de filosofía son inagotables o incalculables, por lo que trabajar con diversos y múltiples materiales hace que la comprensión del texto sea llevadero.