Alan Santiago Quintero Saavedra

Mis clases se preparan teniendo en cuenta la población a la que se dirigen las clases y de las necesidades de los y las estudiantes. Partiendo de allí, se diseña una ruta a seguir por contenidos y se asignan determinados recursos para la realización de las clases. Principalmente me parece idóneo comenzar con actividades y ejercicios menos complejos e ir avanzando progresivamente con la dificultad de los mismos. De este modo, a medida que vamos aprendiendo nuevos temas, asimismo vamos mejorando nuestras habilidades de lectura, escritura y oralidad.

Siguiendo estos pasos, las clases en primera medida van siendo desarrolladas por mí, presentando los temas con ejemplos ilustrativos y/o de contenido audiovisual, proponiendo preguntas y ejercicios en torno a eso, para luego pasar a ejercicios de lectura y escritura que sean hechos por los mismos estudiantes, por supuesto bajo mi guía y corrección.

Así, cada persona podrá conocer poco a poco en qué consiste el ejercicio filosófico, sus etapas, desafíos y su practicidad. Con todo, los y las estudiantes reciben de manera íntegra clases dedicadas a reforzar sus habilidades lectoescritoras, tales como identificar, cuestionar y proponer tesis, argumentos y conclusiones para expresar de mejor manera sus pensamientos.