Estrés a la hora de aprender un idioma o un adquirir un hábito de lectura

¿Alguna vez te has sentido estresado a la hora de sentarte a estudiar? Puede ser que quieras aprender un idioma, o estés iniciando intencionalmente a leer literatura o algún libro de ciencias sociales o humanidades.

Iniciar el hábito lector o el hábito de estudiar puede ser muy abrumador, sobre todo en nuestro contexto, en el siglo XXI y con tanto entretenimiento, no debería sosprendernos de sentirnos casi impotentes de iniciar estos nuevos hábitos. Por ello, debes saber que es totalemnte normal que experimentos esto. Pero hay formas de atacar este tipo de obstáculos, tanto a la hora de aprender un idioma como el iniciar con el hábito lector y de estudio. Acá te presento algunos consejos para ello:

  1. 1. Prepara tu ambiente
  2. 2. Prepara tu mente
  3. 3. Aplica técnicas de relajación
  4. 4. Aplica técnicas de motivación
  5. 5. Disfruta el tiempo de estudio

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1. Preparar el ambiente. Es importante que tengas un sitio donde vayas a estudiar. No tiene que ser la habitación o un escritorio de lujo, puede ser una mesa y una silla cómoda para ti, y específicamente usada para tus tiempos de estudio. Debes mantenerla ordenada y darle un estilo particular, esto te ayudará a apreciarla y hacer de tu experiencia de estudio un ambiente agradable.

2. Preparar tu mente. La mente es poderosa, y forma parte medular de las decisiones. Por ello, es importante que tengas en cuenta aquella meta o sueño que quieres alcanzar; desde cosas sencillas como: aprender el idioma español nivel 1, o leer un libro completo de 50 páginas, hasta metas más grandes como, aprender completo un idioma para irte a estudiar al extranjero, leer un libro de 200 páginas para estudiarlo. En realidad el tener bien definido lo que quieres lograr te ayudará a enfocarte en tus actividades de estudio, sea cual fuera la forma en la que trabajes.

Estilos de estudio y aprendizaje hay muchos, dependiendo de tu personalidad. Lo importante es que te conozcas para que puedas adecuarlo a tu modo, de manera que puedas ser efectivo y no lo sientas una carga.

3. Tener una o más técnicas de relajación te ayudarán no sólo a enfocarte sino a ir creando el hábito de estudio o lectura. Te ayudará a tener un momento previo para ti, donde podrás pensar y tomar fuerza emocional para iniciar con tu labor. Puedes hacer diversas actividades, te doy algunas ideas:

a) Darte una ducha con agua fresca antes de iniciar a estudiar.

b) Prepararte un té, café o bebida favorita.

c) Dejar todos los pendientes en pausa, llamadas, mensajes u otras distracciones.

d) Poner música relajante (ondas alfa, instrumental o de la naturaleza.

Esta labor de relajación puede durar entre 5 y 10 minutos, dependiendo de tu estilo y concentración. Al inicio será difícil, probablemente, pero esto te ayudará a tener un proceso inicial para que tu cerebro tenga en cuenta que estarás entrando en otra "dimensión", en una de estudio y concentración. Poco a poco te irás acostumbrando.

4. Aplicar técnicas de motivación. Esta etapa está totalmente relacionada con las anteriores; se puede decir que es más específica porque además de estar relajado/a, una recomendación es que puedas tener de cerca algo que te recuerde por qué quieres hacer esa labor. Por ejemplo, en tu escritorio puedes tener de cerca los libros que quieres leer ese mes. Si vas a iniciar con una lectura, averigua más sobre el libro y sobre su contexto, conoce la cultura de la época, la música; si es una novela, y aparecen eventos como bailes, tipo de gastronomía, entra a investigar sobre ello en Internet; si es sobre una zona geográfica, entra a conocer el mapa del lugar del cual relata el libro. Entra al mundo del libro y eso te irá motivando a aprender más, pues harás de tu experiencia más que un momento aislado, uno que tiene mucho que ver con la realidad que te presenta el texto. Si es sobre estudio de un idioma, puedes averiguar la cultura por medio de videos, películas e imágenes que te trasladen a esa realidad. El practicar el idioma con amigos de dicha cultura te ayudará sin lugar a dudas.

Por ende, la motivación no se detiene con tu interés de aprender sino que se alimenta con la experiencia, el irse adentrando con el estudio hará de ese momento el más hermoso de tu día y lo esperarás con mucho gusto. Esta es una manera de crear un buen hábito lector o de estudio. Todo esto nos lleva al punto número cinco.

5. Disfruta el momento de estudio. Una de las cosas que aprendí a la hora de realizar un trabajo de investigacción es que mientras más lo disfrutes más fluído será tu búsqueda y encuentro de resultados. Cuando trabajamos con pasión no sentiremos que es un carga o un momento aburrido, al contrario, buscaremos ser los mejores en nuestra labor. Diferente es si sientes que estudiar es un asunto obligatorio o un peso que no necesitas llevar.

Al tener todos los elementos anteriores, al tener un buen enfoque, tanto físico como mental, estar relajado y muy motivado, lo siguiente será disfrutar el tiempo de estudio o lectura. Si dispones una hora al día para ese trabajo, será una hora bien aprovechada, si dispones de media hora, será media hora bien aprovechada; si has de dedicarle dos horas, serán las mejores dos horas de tu día. El disfrute de la lectura o estudio estará acompañada con: 1. Un buen ambiente, 2. Una buena mentalidad, 3. Relajación, 4. Motivación. Todos juntos te llevarán a una meta: crear hábitos de estudio y reducir tu estrés o sentido de imposiblidad de llevar a cabo tus metas de estudio.

Soy Silvia Polanco, Lic. en Literatura, profesora de Español, editora y escritora de ensayos y textos literarios.

He trabajo en conferencias y talleres sobre el fomento a la lectura y el hábito lector para niños, adolescentes y adultos. He dado talleres de cómo escribir y tener una buena gramática.

Si quieres aprender más no dudes en contactarme, mi correo es